La carne fecunda el goce
Y respira libertad por una hora y media
Nuestro amor están profundo como este cielo raso, raso soy, cabildo de tu amor.
La carne fecunda el goce
Y respira libertad por una hora y media
El domingo 22 de mayo de 1960 un terremoto y un maremoto asolaron Chile desde Coronel hasta Chiloé.
El terremoto grado 9.5 redujo a escombros a la ciudad de Valdivia. Bajó el terreno, cayeron edificios, fábricas, retenes de carabineros, cuarteles de bomberos, casas. Se cortaron puentes y caminos. Reventaron las redes de agua potable y alcantarillado. Los tendidos eléctrico y telefónico quedaron en el suelo. Se partieron las calles.
El maremoto con olas de 12 metros de altura arrasó con el puerto de Corral, hundiendo barcos, faluchos, goletas, lanchas y embarcaciones menores.
Las pérdidas en vidas humanas superaron las 5.000 y los daños materiales alcanzaron al medio billón de dólares. Los damnificados se contaron por miles.
Hubo que construir más de 5.000 rucos para albergar al pueblo sin casa y repartir 48.000 raciones diarias de alimentación.
Gonzalo Soto Melo